Besser-Siegmund, C. u. (2013). Mit Freude läufts besser - durch wingwave positive Emotionen fördern und Leistung steigern. Paderborn: Editorial Junfermann.

Una de las críticas que se le hace al test miostático clásico es que hasta la fecha no se posee ninguna experiencia sobre con qué frecuencia se puede realizar la prueba sin que la musculatura de los dedos del sujeto en cuestión se canse. Por esta razón, el objetivo del siguiente estudio era verificar si la repetida realización del test miostático  producía efectos de fatiga significativos que pudieran perjudicar la fiabilidad del procedimiento.

Para abordar esta cuestión,  se reclutaron diez sujetos de prueba con edades entre los 19 y los 30 años (media = 22,7 años). En este estudio cada sujeto se sometió a 60 mediciones de su fuerza digital individual con la ayuda de un dispositivo, a fin de conseguir una medición objetiva de la prueba miostática. Los sujetos a prueba debían intentar mantenerse en un estado emocional neutro, por lo que entre cada una de las 60 mediciones se dejaba pasar un intervalo de 30 segundos. Las mediciones se grabaron con una cámara y dos evaluadores independientes debían decidir si los dedos se separaban o los sujetos los habían conseguido mantener unidos en cada una de las mediciones.

Los resultados mostraron que a lo largo de una serie de mediciones del test miostático no se producían cambios significativos de la fuerza en esta relación específica entre estrés o tensión y pausa que pudieran indicar un efecto de fatiga tras varias repeticiones.